La Infancia
El aprendizaje comienza en la infancia, mucho antes de que empiece la educación formal, y continúa durante toda la vida. El aprendizaje temprano engendra el aprendizaje posterior y el éxito temprano genera el éxito posterior, tal como el fracaso temprano genera el fracaso posterior.” (James J. Heckman)
“Las intervenciones de alta calidad en la primera infancia tienen efectos duraderos en el aprendizaje y la motivación.” (James J. Heckman)
Importancia del Juego en el Desarrollo del niño.
Jugar para el niño es vivir. Los juguetes son instrumentos para su desarrollo y felicidad. Jugar es un derecho de la infancia reconocido por la ONU desde 1959 (Resolución nº 1386 de la Asamblea de Naciones Unidas). Mirar cómo juegan los niños es observar cómo es el desarrollo integral del niño. Investigaciones en el campo de la Pediatría y Psicología Infantil avalan la importancia del juego para los niños.
Mientras el niño juega explora la realidad. Prueba estrategias distintas para operar sobre dicha realidad. Prueba alternativas para cualquier dilema que se le plantee en el juego. Desarrolla diferentes modos y estilos de pensamiento. Jugar es para el niño un espacio para lo espontáneo y la autenticidad, para la imaginación creativa y la fantasía con reglas propias. Le permite curiosear.
¿Qué juego tendremos en cuenta según la edad?
- De los 0 a 3 años juego y
movimiento están muy relacionados. En estas primeras edades, el desarrollo
psicomotor grueso (desplazarse, saltar, correr,
etc.) y fino (manipulación) cobran mucha
importancia.
- Alrededor de los 3 años el hito más
importante en el desarrollo del niño es el surgimiento de la capacidad desimbolización (hacer
que una cosa sea otra diferente a lo que es en la realidad; por ejemplo, hacer
que un simple palo sea un peine, o un avión que vuela, un micrófono para
cantar, una cucharita para darle de comer a la muñeca, etc.). Junto al
juego simbólico aparece una poderosa herramienta de expresión de los propios
intereses y de la forma personal de interpretar las cosas: el lenguaje
oral.
Las acciones del juego en estas
edades son repetitivas. Es un juego sin finalidad determinada que se repite de
una forma monótona una y otra vez.
- De los 3 a los 6 años el juego
sigue siendo movimiento sin perjuicio de la comunicación y la representación.
Es en este momento en el que los juegos de casitas, papás y mamás,
de médicos, etc., sirven para que los niños/as puedan entender el
mundo adulto y sus relaciones entre ellos, con los niños/as y con el medio.
En este momento las acciones del
juego son un reflejo de las acciones que el niño observa en su vida cotidiana y
real.
- A partir de los 6 años, el juego
como actividad física pasa a ser la práctica de algún deporte en
el que tendrá que cumplir unas normas y reglas.
Aparecen en estas edades los aspectos morales dentro
del juego, que tendrán un papel muy importante en esta etapa del desarrollo
(los juegos de mesa colectivos son un claro ejemplo de ello). Es aquí y ahora
cuando se aprende a competir y a cooperar, a sentir el éxito y el fracaso. El
juego es más social que nunca.
Las acciones en el juego se hacen más
sofisticadas. Se asumen papeles no reales, no vividos por el niño en primera
persona. También papeles imposibles, imaginarios y fantásticos. Las acciones
cobran una variedad infinita.
A esta edad, de los 6 a los 12 años,
es muy importante iniciar al niño en el amor por la lectura.
Un buen libro puede ser un excelente juguete. Desde hace unos años también a
esta edad, los niños se inician en el manejo de las nuevas
tecnologías.
En la actualidad la oferta de juegos
electrónicos es infinita. Ofrece todo tipo de posibilidades positivas para el
buen desarrollo cognitivo-conceptual de los niños (juegos de memoria, de
atención, de percepción, de lenguaje, etc.). Es esencial el buen uso de ellas.
Por último, no olvides como
padre/madre, regalarte con el juego. Compartir parte de tu tiempo de ocio con
tu hijo a través del juego es una experiencia grata y enriquecedora para toda
la familia.